Pechugas de Pollo Glaseadas con Salsa Teriyaki y Piña

PECHUGAS DE POLLO GLASEADAS CON SALSA TERIYAKI Y PIÑA (4 Personas) Convertir unas sencillas pechugas de pollo en un plato lleno de brillo y sabor es más fácil de lo que parece, tan solo con unos pocos ingredientes y fruta fresca y ya podemos disfrutar de estas ricas pechugas, muy buenas para una cena ligera, pero que no sea aburrida. En esta ocasión la salsa teriyaki no la vamos a utilizar de la preparada comercialmente, sino que simplemente le aportamos su particular sabor gracias a la unión de tres ingredientes con los que formamos una mezcla muy fácil. INGREDIENTES: 4 Medias pechugas de pollo, grandes. 2 Limones. 2 Cucharadas de aceite de girasol, maíz y de maní. 4 Cucharadas de agua. 30 Grs. de jengibre fresco. 2 Cucharadas de miel. 2 Cucharadas de vinagre de arroz. 2 Cucharadas de salsa de soya. 150 Grs. de piña fresca. PREPARACIÓN: 1) Lavar muy bien las pechugas con el limón, enjuagar y secar con papel de cocina. 2) Calentar el aceite en un sartén antiadherente a fuego medio-alto, añadir las pechugas de pollo y las cocinarlas por ambos lados durante cuatro minutos, aumentar la potencia del fuego y añadir el agua, dejar que el pollo se cocine durante otros seis minutos. 3) Mientras se cocina las pechugas, picar el jengibre fresco en trozos y lo metemos en el vaso de una licuadora, triturar con las cuchillas, y añadir encima, la piña en trozos, la salsa de soya, el vinagre de arroz y la miel, volver a triturar hasta que se forme una salsa espesa. 4) Reducir el fuego a medio y verter la salsa encima de la carne y llevar a ebullición. Girar la carne en la salsa para que se impregne por todos los lados, y cocer hasta que la salsa comience a tomar aspecto de glaseado. Servir bien caliente. Esta receta se complementa muy bien con un arroz basmati aromático, o una ensalada. es una receta sencilla, pero llena de sabor, capaz de transformar unas simples pechugas de pollo en un plato exótico.