Salsa Brava Casera

SALSA BRAVA CASERA (1½ Tazas) Receta para hacer salsa brava casera, artesanal y natural, se puede hacer tan picante como e desee. La receta de salsa brava es una de las elaboraciones en su clase, más popular en la gastronomía española, es inseparable de las papas fritas en las tapas más tradicionales, nadie deja de disfrutar una y otra vez de una ración de papas bravas cuando se va de tapas. Pero seguramente estarán de acuerdo con nosotros en que hay demasiadas diferencias entre una salsa brava y otra. Cuántas veces habremos pedido papas bravas y nos sirven unas papas fritas con un par de cucharadas de mayonesa y pimentón picante espolvoreado, o una salsa de color rosa que es brava porque pica, pero no se sabe a que sabe, otras veces es tomate frito con tabasco… Efectivamente, se le llama salsa brava a un amplio abanico de salsas, y es que posiblemente es difícil descubrir cuál es la auténtica receta de salsa brava. Hoy compartimos con ustedes nuestra salsa brava, una de las variantes que hacemos y que nos encanta. Seguramente a muchos les agradará disfrutar del aperitivo en casa, así que esperamos que les resulte útil y les guste. INGREDIENTES: 700 Grs. de tomates perita. 1 Cucharada de azúcar. 1 Cebolla blanca mediana. 2 o 3 dientes de ajo. Pimienta de cayena (la cantidad necesaria según lo picante que se desee hacer la salsa). 1 Cucharadita de pimentón de la Vera picante (se pueden mezclar con pimentón dulce). ¼ Cucharadita de pimienta negra recién molida. Un chorrito de vinagre de Jerez. Aceite de oliva extra virgen. ½ Cucharadita de sal. PREPARACIÓN: 1) Rallar los tomates y añadirles una cucharada de azúcar. Pelar la cebolla y picarla, pelar y picar también los ajos. Retirar los rabitos y las semillas de la cayena. 2) Poner un poco de aceite de oliva en un sartén y pochar la cebolla con una pizca de sal a fuego medio-bajo, cuando esté transparente y blandita, añadir el ajo picado y continuar rehogando hasta que esté hecho. Incorporar la cayena y el pimentón; en unos instantes desprenderá su aroma, entonces verter el tomate rallado, subir el fuego, salpimentar al gusto y añadir el vinagre de Jerez. Nosotros ponemos muy poquito porque no nos gusta que se note. 3) Cuando la salsa de tomate empiece a hervir, bajar el fuego y dejar cocer hasta que se evapore casi por completo el agua del tomate, mover de vez en cuando y probar por si se desea que esté un poco más picante. Si por el contrario se han pasado, siempre se puede añadir más tomate, pero hay que pensar que después hay que poner salsa brava en cantidad moderada sobre las papas. 4) Antes de que la salsa haya evaporado toda el agua, pasarla al vaso de la licuadora, retirar las cayenas y triturar hasta obtener la textura deseada. Para terminar y recuperar el color de la salsa, volver a verterla en el sartén, dejar reducir cinco o diez minutos más y después dejar enfriar la salsa brava casera. 5) Ahora sólo queda hacer unas buenas papas fritas y bañarlas con la salsa brava, pero no se pierdan esta salsa con otros ingredientes como unos pinchos de carne o una tortilla de papas. ¡Buen provecho!