Cubos de Pechugas de Pollo en Salsa de Pimienta Casera

CUBOS DE PECHUGAS DE POLLO EN SALSA DE PIMIENTA CASERA (2 Personas) Solemos comer pollo con bastante frecuencia y procuramos variar a menudo las recetas para no cansarnos ya que por sí solo el pollo (y en especial las pechugas) no tienen demasiado sabor. Hoy vamos a preparar unos jugosos cubos de pollo con una deliciosa salsa de pimienta casera. Cuando cocinamos los muslos de pollo, los hacemos lentamente como nuestros muslos en salsa de tomate especiada o los que asamos con salsa de vino y limón (ver recetas), pero cuando tenemos apuro, preparamos pechugas, pero en general no las compramos fileteadas sino que las cortamos en cubos o en medallones para que queden más jugosas. INGREDIENTES: 2 Pechugas enteras de pollo. 1 Cucharada de aceite de oliva extra virgen. ½ Cucharadita de sal gruesa o marina. Para la salsa de pimienta casera: 100 Ml. de crema de leche líquida espesa. 25 granos de pimienta (negra, blanca verde y/o rosada) Cucharadita de Bovril u otro concentrado de carne. PREPARACIÓN: 1) Comenzar troceando la pechuga de pollo en cubos, cortándola de forma transversal. Procurar cortarlos gruesos para así, al cocinarlos se mantendrán más jugosos. 2) Poner el sartén al fuego con la cucharada de aceite de oliva y esperar a que esté muy caliente. 3) Dorar los cubos de pollo en la plancha durante un minutito por cada cara y reservar. En la misma sartén ponemos la crema de leche y dejar que cueza y se reduzca durante dos o tres minutos, y de paso tomará parte de los jugos que haya soltado el pollo, enriqueciendo su sabor. 4) En el mortero machacar los granos de las pimientas (ideal utilizar mezcla de pimientas blanca, negra, roja para un sabor más interesante) y añadir la pimienta a la crema de leche. Si prefieren usar pimienta molida, será necesaria al menos una cucharada blanca y media de pimienta negra. 5) Incorporar la media cucharadita de Bovril o concentrado de carne y probar. 6) Tener cuidado con la sal porque estos concentrados son bastante potentes. Una vez que se tenga la salsa a nuestro gusto, poner los cubos de pollo en el sartén, cubrir con la salsa y dejar que cuezan durante unos minutos, y servir acompañado con papas fritas o arroz blanco. Esta es ideal para cuando no tenemos pensado qué hacer para comer o cenar y no queremos complicarnos la vida. Sin embargo, pese a lo sencillo del proceso, el resultado no nos defraudará. La misma salsa es excelente para solomillo de cerdo y otras carnes blancas.