Mejillones con Salsa Picante de Tomate

MEJILLONES CON SALSA PICANTE DE TOMATE (4 Personas) Últimamente habrán notado que tenemos una afición fuerte con los mejillones pero es que hemos encontrado unas recetas espectaculares y unos mejillones de Nueva Zelanda que son de maravilla. Tras unas cuantas recetas con sabores más suaves, les tenemos una sencilla receta para disfrutar tanto con los mejillones como con su salsa, con esta receta de mejillones en salsa picante de tomate. El objetivo es conseguir una salsa de tomate, que sea picante pero sin excesos, que deje un regusto picantico y que mejillón a mejillón, conforme el efecto acumulativo del picante vaya aumentando, no nos llegue a cansar, como cuando preparamos los mejillones con tomate a la marinera. Para la receta de hoy, vamos a partir de una salsa de tomate frito casero que se irá enriqueciendo con especias y condimentos. INGREDIENTES: 12 Mejillones de buen tamaño. 1 Tomate carnoso. Salsa de tomate casera (ver receta). Especias al gusto (pimienta negra, ajo deshidratado, cayena, guindilla, semillas de cilantro o y otras que sean de su gusto) 3 Ramas de cilantro fresco. 1 Copa de vino blanco seco. ½ Cucharadita de sal. PREPARACIÓN: 1) Para esta receta, como para casi todas las de mejillones, comenzar limpiando bien las cáscaras de los mejillones y retirando las barbas. A continuación poner en un sartén los mejillones añadiendo un chorrito de vino blanco y los abrimos al fuego, tapando el sartén para que se abran rápido. Guardar los líquidos de la cocción. 2) En otra olla preparar la salsa picante de tomate, partiendo de una base de tomate casero. Sobre el tomate, añadir 4 cucharadas de vino blanco y otras 4 de los jugos de abrir los mejillones. Remover y llevar a ebullición, dejando que reduzca unos minutos. 3) Añadir las especias y dejar que se cocine todo junto. Entretanto, pelar un tomate carnoso y lo cortarlo en trozos tamaño bocado, añadiéndolos a la olla para que la salsa tenga algunos tropezones. Incorporar los mejillones abiertos a los que retiramos una de las conchas a la cocción, dejando que se impregnen de los sabores cociendo en el tomate durante un par de minutos. 4) Picar el cilantro fresco y añadir una buena cantidad, dejando que aporte su frescor y toque picante a la salsa de tomate. Sacar los mejillones a la fuente donde se vayan a servir y cubrirlos con la salsa de tomate. Espolvorear con un poco más de cilantro picado y lo llevar a la mesa. Lo mejor de esta receta de mejillones con salsa picante de tomate y cilantro es que están tan buenos los tropezones como la propia salsa por lo que será necesario que se tenga bastante pan tierno listo para que todos puedan probarlo. Preparar servilletas de papel ya que en esta receta que se come con las manos, éstas suelen manchar bastante y la mancha de tomate es difícil de quitar en las servilletas de tela.