Caracoles a la Madrileña

CARACOLES A LA MADRILEÑA


(4 personas)





INGREDIENTES:



6 Docenas de caracoles (de lata), o vivos, y cocidos.

1 Atado que contenga tomillo, laurel, hinojo y una guindilla.

½ Cucharadita de sal.

½ Kgs. de cebolla picadita en julianas.

¼ Cucharadita de pimienta negra, recién molida.

4 Dientes grandes de ajo, picaditos en láminas finas.

1 Cucharón de aceite de oliva, extra virgen.

½ Cucharadita de sal.

150 Grs. de jamón serrano, picado en cuadritos.

4 Tomates maduros, rallados.

1 Guindilla.

1 Cucharada de pimentón dulce.

Aceite de oliva, extra virgen.

½ Cucharadita de sal.



PREPARACIÓN:



1) Si los caracoles son vivos, lo primero de todo es dejar los caracoles “vivos” en ayuna durante varios días, y luego dejarlos en agua, sal y vinagre para que suelten toda la baba y se lavan varias veces cambiándoles el agua.

2) Se echan en una olla con agua fría hasta que sequen los cuernos, y cuando sequen, irán asomando todo e cuerpo y en ese momento se sube el fuego al máximo y se cuecen un rato.

3) Esa agua se cambia una vez y se coloca agua fría pero a fuego fuerte. En esa agua se coloca un atadillo de hierbas, Tomillo, laurel, hinojo y una guindilla. Dejar hervir unas 3 horas y a la mitad se le agrega la sal.

4) Si los caracoles son de lata, solo hervir por 5 minutos con los aderezos.

5) Preparar un sofrito con el tomate, las cebollas, e ajo y las especias. Al final incorporara el pimentón dulce a fin de evitar que éste no se queme.

6) En el agua utilizada para hervir los caracoles

7) Sofreír las cebollas y el ajo en un sartén con aceite un poco de sal.

8) Cortar el jamón en taquitos y rallar el tomate y cuando la cebolla comience a dorar, se añade el jamón, la guindilla y el pimentón. Se le da una vueltas y antes de que se queme el pimentón, se agrega el tomate y el comino.

9) Por último, se agregan los caracoles, mezclándolos bien con el sofrito. Se incorpora el caldo al sofrito y se deja cocer todo junto, a fuego lento durante 20 minutos. Se rectifica la sal y la pimienta si fuera necesario.





Servir con un buen pan gallego o campesino.