Crema de Champignones Portobello con Tocino Acaramelizado

CREMA DE CHAMPIGNONES PORTOBELLO CON TOCINO ACARAMELIZADO (4 Personas) Esta receta, dependiendo de la forma de servirla, puede ser un aperitivo ideal para comenzar una comida o bien un contundente primer plato. Los champiñones Portobello con su color y sabor característicos aportan un toque diferente a la ya clásica crema de champiñones y aconsejamos que no se deje pasar el pinchito de tocino caramelizado pues el contraste con la crema es delicioso. INGREDIENTES: Para la crema: 300 Grs. de champiñones Portobello. ½ Cebolla pequeña. ½ Diente grande de ajo. 30 Grs. de mantequilla. 200 Ml. de nata ligera para cocinar. 200 Ml. de vino blanco seco. 200 Ml. de agua, caldo de pollo o de verduras. ½ Cucharadita de sal. ¼ Cucharadita de pimienta blanca, mejor si es recién molida. Para el tocino caramelizado: 100 Grs. de tocino. 50 Grs. de azúcar. ½ Cucharadita de pimentón dulce, seco y molido. PREPARACIÓN: 1) Limpiar los champignones y cortarlos en trozos, seguidamente picar la cebolla y el ajo y derretir en una olla la mantequilla. Sofreír la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes, añadir los champignones y cocerlos durante cinco minutos y añadirles la sal y la pimienta blanca. 2) Añadir el vino y dejar que se evapore durante otros cinco minutos, añadiendo seguidamente el caldo y cociendo todo junto otros diez minutos más. 3) Calentar en un envasito la nata y añadirla a la olla, removiendo para integrar todos los ingredientes. Dejar hasta que llegue a ebullición y triturar con una licuadora. Si se desea muy fina, pasarla por un chino. Rectificar de sal. 4) Para preparar los pinchos de tocino caramelizado precalentar el horno a 350 grados F en broil. En un bowl mezclar el azúcar con el pimentón. Cortar el tocino en tacos como de dos centímetros y rebozarlos en la mezcla de azúcar hasta que estén bien impregnados, hornearlos durante seis minutos hasta que estén tostaditos. Insertarlos en una mini brocheta para acompañar la crema. Esta crema hay que servirla muy caliente para apreciar bien su sabor y textura. Nos gusta servirla en vasitos como aperitivo de una comida donde se vayan a comer varias cosas, pero sino, siempre se puede presentar en los clásicos recipientes para cremas y consomés como un primer plato.